Una entrañable historia de amistad entre un perro y un niño vista desde otra perspectiva.
Tener una mascota es una experiencia enriquecedora, pero cuidar de ella no es tarea fácil. Hacen falta altas dosis de cariño y empatía, aunque también de mucha paciencia. Este álbum, escrito por David Hernández Sevillano, narra con humor e ironía la relación de amistad entre Coco y su “mascota” desde un punto de vista diferente, invitándonos a acompañarlos a lo largo de un día repleto de aventuras, juegos y complicidades.
Las ilustraciones minimalistas de Alejandra Estrada complementan el texto acentuando este juego de roles entre los dos protagonistas. Utiliza trazos ágiles y dinámicos marcando la gestualidad y la expresividad corporal de ambos.