Paris es un juego de mesa para dos jugadores de José Antonio Abascal infundido con la estética parisina por Oriol Hernández. El juego está ambientado a finales del siglo XIX en París durante la "Exposición Universelle" de 1889, o feria mundial, cuando la electricidad pública era un tema candente. La electricidad se extendió por toda la ciudad, creando las hermosas calles nocturnas parisinas de hoy en día y acuñando el apodo de París "La Cité de la Lumiére", la ciudad de las luces.
Los edificios más bien iluminados son admirados más por los transeúntes. En la primera fase, los jugadores pueden colocar fichas o aumentar su reserva de edificios. Las baldosas adoquinadas se dividen en 4 espacios aleatorios (su color, el color de sus oponentes, una farola o un espacio de color mixto donde cualquiera de los jugadores puede construir).
Luego, en la segunda fase, los jugadores construyen sobre su color o los espacios mixtos, en el esfuerzo de posicionar sus edificios lo más cerca posible de tantas farolas como sea posible. Más farolas solicitan más adoración y puntos. El jugador con los mejores edificios iluminados roba los corazones de los peatones parisinos y gana el juego.