¿Qué lleva a las personas a querer ser artistas? ¿Qué se esconde detrás de la pulsión de apartarse de la gente «normal» que vive y muere en silencio? A partir de una obsesión, y trazando ondas expansivas concéntricas de entusiasmo y miseria, El dios reflectante retrata las consecuencias últimas del acto creativo. Matsuhiro Takei, niño prodigio, cineasta de culto y superviviente de una infancia a la sombra del «Salinger japonés», emprende el rodaje de su segunda obra, Estupidez terminal. Pieza central del recién creado género del cine de artes marciales de arte y ensayo, la película narra el colapso del sistema neurológico humano por culpa de una masa crítica de pensamiento. El proyecto de Matsuhiro, sin embargo, empieza a ser modulado por la presencia de la gente que lo rodea: Spencer Sykes, mesías del vídeo porno libertario; Anatol Trilinka, luchador de kung¯fu amateur en plena crisis existencial; Pola Arthur, adolescente postanoréxica en busca de su primer amor, y, por encima de todos, Sullivan Banks, académico de sensibilidad trágica cuyo destino está ligado a la Clínica para Desórdenes Mentales No Clasificados del doctor Smilowitz. Novela coral y abierta, donde la extrañeza de la vida cotidiana convive con docenas de monstruos nacidos del miedo, el ansia y la violencia.
